
Por una caries me arruino,
la cirugía, ni se sabe,
y, si la cosa es más grave,
sin un seguro divino
al cielo en caja de pino,
y un infarto sin tarjeta
o sin cartera repleta
(sea blanca, negra o hispana)
es tragedia americana.
Así pues, Obama, aprieta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario