Eurocarajal

Existe grave sospecha
cuando la crisis no ceja
que el tinglado se maneja
en ubicación y fecha
por la gente que no pecha
con el coste principal
del gran eurocarajal;
que, mientras la peña mira,
en el aire se respira
la estafa piramidal,
y que reinventan la rueda
para robar lo que queda.