De siempre a gritar dispuesto
contra la hijaputa CIA,
al escuchar su porfía
con el presidente electo
por negocios harto infectos
y temas de prostitutas,
veo que mi actitud se muta
y ahora no dudaría:
¡entre Donald y la CIA,
me quedo con mi hijaputa!
No hay comentarios:
Publicar un comentario