Ay, Franco, qué poca mili
en Cuelgamuros te queda,
pues tras el toque de queda
supremo, para las Pilis
levantarán los mil kilis
de tu catafalco infame,
y, aunque el facherío brame,
tendrás eterno connubio
con tu santa en Mingorrubio
para que el ultra te aclame.
Antaño fuíste aznarista,
rajoyano anteayer,
vuelta al bigotes ayer
y ahora teniendo a la vista
que Rivera se despista
y la voz de VOX no truena
vuelven palabras serenas
y ya no frunces el ceño,
que el bipartidista sueño
con sus tropetas resuena
(salvo que Álvarez Toledo
la cague con su denuedo).
Que ninguno pierda el sueño,
ni a nadie llamen traidor,
ni que simule candor
el competidor pequeño,
que pongan todos empeño
en que no se pierda un voto,
pues no es evento remoto
que al adversario que acecha
por la ribera derecha
puede tocarle la loto.
Hablar del cambio climático
es citar a Bolsonaro,
a Donald Trump, el ignaro,
a los incendios selváticos,
hablar de mares de plásticos
que invaden la geografía,
de huracanes y sequías,
de la bien hallada Greta,
de la asfixia de un planeta
en imparable agonía.
Aunque el "impeachment" fracase,
bien me mola el espectáculo
que alguien que, desde el pináculo
de la White House, se abrase,
y por tal razón me place
que sobre el zote narciso,
al modo de Richard Nixon
por el caso Watergate,
caiga el peso de la ley
o funcione en modo occiso.
Después de dar mucha risa
porque había dilación
en lograr la exhumación
(o porque había mucha prisa)
lo del Caudillo aterriza
en la plena precampaña,
así que Pedro de España
consigue que el rojerío
salga raudo del hastío
y se quite la legaña.
Opina con despabilo
cierto togado albañil,
en providencia cerril
que tiene al país en vilo,
que, al retirar dos mil kilos
en el atrio de la nave,
acaso se menoscabe
la planta del edificio,
y tú te quejas, de vicio,
viendo que existe conchabe
por la común francofilia
entre el juez y la familia.
Cómo expresar mi alegría,
y que mi boca no calle
cuando al fin se irá del Valle
esa calavera arpía?
¿Cómo calmar la afonía
de los que siguen gritando
contra el tirano nefando
lacra de la España nuestra
que con espada siniestra
mató, y murió matando?
¡Al fin, calma, compostura,
que murió la dictadura!
(24 de septiembre de 2019,
a tres días del 44 aniversario
de los últimos fusilamientos del
Gran Asesino)
¿Qué le ha hecho el Errejón
a los medios de estribor,
que le tildan de traidor
por frenar la conjunción
de la zurda, y, con pasión,
con Almeida y con Ayuso,
sugieran que es un abuso
que al presentarse malogre
la binaria alianza progre?
¡Me deja patidifuso
que a la diestra dé tristeza
ver a la izquierda en tres piezas!
Lo digo por si se ignora:
con noviembre en las calendas
el miedo tomará en prenda
la dialéctica sonora
de donde el poder no mora,
y sospecha mi nariz
que humillará la cerviz
ante el alto capital
la nómina electoral
(sea cual sea el matiz).
Urdanga, menuda breva
es que te lleve un taxista
para que pierdas de vista
la fría cárcel de Brieva,
pues el siervo de la gleba
que pena cruda mazmorra
no consigue por la gorra
lograr tan buen tratamiento,
aunque, bien pensado, miento:
Oriol Pujol, el de Andorra.
Sépanlo las pitonisas,
los gurús de los mercados,
los votantes enfadados,
los tertulianos con prisa,
las científicas pesquisas
de los agudos sondeos,
los tramposos saduceos,
los poderes invisibles:
el futuro es inasible,
somos del presente reos.
Entre tantas jeremiadas
por lo que sería y no fue,
en los medios lo que ves
son jergas interesadas
sobre las urnas cansadas,
así que cabe advertir
que se deben bien medir
los reproches al sistema,
porque si el voto se quema
todos vamos a reír.
Apréndase geopolítica,
sépase el precio del crudo,
léanse textos sesudos
y monsergas analíticas,
elévense voces críticas,
mas quien carga gasolina
aguanta, aunque adivina
que ¡ya! subirá de precio,
pero que sería un necio
si espera que aquí y en la China
favorezca al usuario
la cuenta en caso contrario.
La frase "sangre, sudor
y lágrimas" de Sir Winston
poco será frente al finstro
que otro premier, malhechor,
prepara contra el clamor
de una (ex)pérfida Albión,
que denuesta la ablación
de Europa y su vieja historia
y denuncia una ilusoria
frontera de quita y pon.
Por no admitir coalición,
o no quedarse sin ella,
Pedro y Pablo hacen pellas
de lo que es su obligación,
y ante tanta diversión
repruebo el trance tremendo
de seguir con la nintendo
sabiendo que la derecha
saliva con cierta fecha.
¡Que me aspen si lo entiendo!
Admirose un portugués
al ver con cuanta cargancia
las dos zurdas comandancias
se espetaban ¡ceda usted!
"Arte diabólico es"
dijo Pedro sin empacho,
"que un Gobierno con dos cachos
se llevaría más que mal,
y, Pablo, veo fatal
en Moncloa a tus muchachos".
Homenaje a Nicolás Fernández
de Moratín (1737-1780)
Ay, Cebrián, poco favor,
vista ya tu peripecia,
le haces a Pablo Iglesias,
pues alabas con fervor
al que algún año anterior
pusiste de vuelta y media,
y es que toda esta comedia
es porque no te dio medro
un tal Sánchez, cierto Pedro,
a tí, boss de los mass-media,
que sentaste tus reales
en tiempos inmemoriales.
Britania: aquí tenemos
mil años de democracia,
cuando un payaso sin gracia
comete el acto blasfemo
de llevar hasta el extremo
con argucias y aspavientos
el cierre del Parlamento,
con la reina, con ahínco,
el viejo té de las cinco
y el espléndido aislamiento.
Si España Suma y no resta
cuando llegue el mes undécimo,
se espera un futuro pésimo
para la santa siniestra,
que no suma, más bien resta,
pues el izquierdista elenco
sabe que es harto zopenco
cometer el grande yerro
de discutir de si el perro
resulta galgo o podenco.
Le negamos al político
el crédito y el favor,
más miras alrededor
y ves al "pueblo" tan mítico
sin más espíritu crítico
que el rezongar de los memos,
a los que sin corte vemos
filosofar al tuntún
y alzar el lugar común,
y piensas: los merecemos.
¿Para eso, Riverita,
desde que fueras un pibe
te creamos desde el IBEX,
y en esta hora maldita
cuando la izquierda se cita
(eso, sí, a puñaladas)
tú te escondes en la nada
e irrumpes en la mesnada
de la derecha más fea,
cuando tu cierta tarea
es que desde tu bancada
traigas al sociata al centro
con nuestros anhelos dentro?
Una verdad del barquero
se esconde tras la Estadística,
que en cuestiones crematísticas
y reparto del dinero
hay un axioma certero
que se repite y no cansa,
ya que la media en finanzas
por la izquierda se prefiere,
mientras que la diestra quiere
aumentar la varianza.
No más calcetines blancos,
ni multas en la Gran Vía,
ni exhibir guardarropía,
desenfados y retrancos
desde el más derecho flanco,
ni volverás a ser más
del dinero capataz,
ni criarás, Esperanza,
más ranas de verde panza,
porque te harán luz de gas
hasta tus propios cachorros,
que te negarán con morro.
En la charca de las ranas
chapotea la rana madre
y, para que todo cuadre,
una imputación se gana
la que cremitas afana,
mas, si la vista yo aguzo,
aparte Nacho, el recluso,
auguro frufú de togas
si la Asamblea se interroga
por el pufo de la Ayuso.
La Argentina de Cortázar
que encarceló a los milicos,
donde darle bien al pico
lo aprende la gente en casa,
de nuevo se nos desguaza
reiterando el corralito
con vuelta otra vez al mito
del cargante peronismo
frente al feroz globalismo.
A los hechos me remito.