Vemos a Felipe VI
medirse contra el COVID
pateando Mercamadrid
y llenando así su cesto,
mas poco vale su gesto
de márketing mañanero,
porque la prensa hoy se fija
en lo que más regocija:
viendo arrearse a otros novios
unos navajazos obvios
y unas caricias con lija.
No hay comentarios:
Publicar un comentario