El móvil se te ha jodido
y esa tragedia moderna
de pronto desencuaderna
los cuadernos de tu estilo,
pues, sin noticias, has sido
obligado a la minucia
o a la agosteña tontucia
y así te llega, lector,
esta décima menor
con muy literaria astucia
(hasta que huyó don Juan Carlos
y tú ahí con ese marro).
No hay comentarios:
Publicar un comentario